Hotel de encanto colonial y arquitectura histórica ubicado en la plaza principal de la octava villa más antigua de Cuba conocida como la cuna de las Parrandas, posiblemente la más…
El Hotel, es una edificación modernamente equipada, en el que se ofrecen tratamientos de belleza y mejoramiento de la calidad de vida, a partir de las aguas y fangos mineromedicinales.
En el lujoso barrio de Miramar se encuentra este hotel, con excelentes vistas al mar y fácil acceso a atracciones como la Habana Vieja, la playa del Club Habana, el Acuario Nacional de Cuba, el Delfinario y las Exposiciones de PabeExpo. Este hotel de ciudad situado en el centro, es ideal tanto para viajeros de negocios como para vacacionistas contando con instalaciones que incluyen comida internacional y bebidas de alta calidad en 2 restaurantes y 2 bares, amplias habitaciones y un gran complejo multi-nivel para la natación.
Estas habitaciones cuentan con: Vista a la ciudad, 1 cama matrimonial ó 2 camas individuales, cuarto de baño con ducha, secador de pelo, 220V, teléfono, aire acondicionado, minibar, caja fuerte, radio, TV vía satélite, plancha y tabla de planchar.
Estas habitaciones cuentan con: Vista a la ciudad, 1 cama matrimonial ó 2 camas individuales, cuarto de baño con ducha, secador de pelo, 220V, teléfono, aire acondicionado, minibar, caja fuerte, radio, TV vía satélite, plancha y tabla de planchar.
Miramar se desarrolló en la década de los años 50, cuando los cubanos ricos y famosos emigraron de La Habana Vieja y de otros barrios más al este hacia espacios abiertos a la orilla del mar. Hoy en día, se conoce como el distrito diplomático por la cantidad de embajadas y sedes diplomáticas que alberga. Este reparto exclusivo y grandioso, cuenta con amplias avenidas bien cuidadas como la conocida 5ta Avenida, flanqueadas por mansiones con grandes muros y exuberantes jardines, mostrando el lujo de La Habana.
La arquitectura es diferente en esta parte de La Habana, haciéndose eco de un estilo más Americano, con grandes casas y jardines, con elementos como garajes para dos autos, patios y piscinas particulares. La impresión general es de una grandeza tropical, complementada por los parques y áreas públicas hermosamente diseñados de Miramar.
La ubicación de este barrio junto al mar también se presta a la recreación marítima, y en la década de los años 50, varios clubes náuticos y de playa fueron construidos para las familias de la clase alta que aquí residían. La estancia en este barrio implica un alto nivel de servicio y de las instalaciones, además del fácil acceso a excelentes restaurantes y otros centros de recreación.